Sentimientos durante mi experiencia en La Palma

Resumir en pocos párrafos lo vivido en la isla de La Palma, en mi caso en el municipio de El Paso, es ciertamente complicado, pero voy a intentar hacerlo desde lo que he sentido, de forma cronológica:

PREOCUPACIÓN, la del momento inicial, sobre todo antes de llegar. No sabíamos qué nos íbanos a encontrar, ni en lo material, ni en lo jurídico, ni en las necesidades de la gente que allí nos esperaba.

TRANQUILIDAD, cuando nos reunimos en La Palma los tres decanos que arrancaríamos las tres notarías provisionales, al vernos asistidos tanto por los técnicos de Ancert, como por las autoridades locales, pero, sobre todo, por los funcionarios que nos asignaron en las distintas notarías y que nos recibieron con un cariño que nos emocionó.

ANSIEDAD, al retrasarse el arranque de las notarías: problemas con el transporte del material desde la Península y que no todos los técnicos pudieran llegar por la suspensión de los vuelos, cuando ya los afectados por la erupción del volcán acudían en busca de nuestros servicios.

TRISTEZA, por las gentes que perdieron sus propiedades, pertenencias y los recuerdos de sus vidas y el de sus personas queridas.

ENVIDIA, al comprobar, con los voluntarios de limpieza, que ellos eran jóvenes y yo no.

AGRADECIMIENTO, a los compañeros voluntarios, a nuestros técnicos, a las autoridades, a los funcionarios y, sobre todo, a la gente de la Isla, vecinos que, aun en situaciones muy complicadas, estaban más preocupados por nosotros que por ellos.

ORGULLO, de comprobar cómo el Notariado ha sido capaz de dar respuesta a una situación tan excepcional, con los resultados hoy ya evidentes.

SATISFACCIÓN, por el reconocimiento recibido del Colegio Notarial de Canarias y de su decano y por la visita de nuestra ministra de Justicia, como Notaria Mayor del Reino, y sus palabras por el trabajo realizado.

Quizá no sea esto todo lo que siento cuando pienso en La Palma, pero, desde luego, lo que nunca sentí fue SOLEDAD.

Gracias a los palmeros, POR TANTO.

Por Francisco Cantos, decano del Colegio Notarial de Valencia.